Cuando uno no sabe nada (y la verdad ontológica es que uno nunca sabe casi nada) ve unas manchas en las paredes y lo relaciona con algo que conoce. En este caso estos dibujos nos recuerdan a helechos, o a musgos, o a algo vagamente vegetal. Lo cierto es que no es ningún fósil ni ha tenido ningún origen orgánico. Es pirolusita, óxido de manganeso (MnO₂). Se trata de un mineral formado por cristalizaciones de óxidos de manganeso sobre una roca base formando bellos dibujos fractales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario